Cuauhtémoc Blanco


El paso de Cuauhtémoc Blanco por España fue un tanto variopinto, pues llegó a las filas del Real Valladolid en el 2000, se perdió casi la totalidad de la temporada por una lesión de gravedad ocurrida disputando en encuentro con su selección y finalmente jugaría con más de frecuencia en su segunda campaña dando una buena versión, pero insuficiente para que el conjunto vallisoletano se decidiese por ejecutar el traspaso definitivo del futbolista azteca. Quinielas aparte, Blanco era un jugador muy versátil en zona de ataque, con aportación anotadora (no tanto en Pucela) y de buenos recursos técnicos tales como su famoso regate consistente en sujetar el balón entre sus piernas y saltar con él para evitar a los defensores. Está reconocido como uno de los mejores futbolistas mexicanos de siempre.