El hombre que renunció a ser rey por su carrera deportiva falleció el 3 de julio del 2025 mientras se encontraba en su domicilio a los 61 años de edad. Hablamos de Peter Rufai, portero nigeriano que jugó en Benín, Bélgica, Países Bajos, Portugal, España y su país natal. Rufai, que era príncipe heredero de una tribu cercana a Lagos, llegó en el mercado invernal de la temporada 96/97 para enrolarse en el Hércules, aunque al final del curso firmaría precisamente por el equipo que juega a pocos metros de la Torre de Hércules: el Deportivo de La Coruña. Sin embargo, en tierras gallegas apenas tuvo chance al encontrarse con el indiscutible Jacques Songo’o. La oportunidad de jugar en España llegaría en las postrimerías de su carrera, pues tras su salida de La Coruña jugaría una temporada en el Gil Vicente portugués retirándose al final de la misma. Con Nigeria fue internacional absoluto en 65 ocasiones logrando participar en dos Mundiales, pero el dato más curioso de su bagaje con las Súper Águilas es el hecho de haber anotado un gol en partido oficial a pesar de ser cancerbero. Se trataba de un portero con una talla imponente, sobrio y seguro bajo palos.
Peter Rufai
El hombre que renunció a ser rey por su carrera deportiva falleció el 3 de julio del 2025 mientras se encontraba en su domicilio a los 61 años de edad. Hablamos de Peter Rufai, portero nigeriano que jugó en Benín, Bélgica, Países Bajos, Portugal, España y su país natal. Rufai, que era príncipe heredero de una tribu cercana a Lagos, llegó en el mercado invernal de la temporada 96/97 para enrolarse en el Hércules, aunque al final del curso firmaría precisamente por el equipo que juega a pocos metros de la Torre de Hércules: el Deportivo de La Coruña. Sin embargo, en tierras gallegas apenas tuvo chance al encontrarse con el indiscutible Jacques Songo’o. La oportunidad de jugar en España llegaría en las postrimerías de su carrera, pues tras su salida de La Coruña jugaría una temporada en el Gil Vicente portugués retirándose al final de la misma. Con Nigeria fue internacional absoluto en 65 ocasiones logrando participar en dos Mundiales, pero el dato más curioso de su bagaje con las Súper Águilas es el hecho de haber anotado un gol en partido oficial a pesar de ser cancerbero. Se trataba de un portero con una talla imponente, sobrio y seguro bajo palos.