Catanha


Henrique Guedes da Silva, reconocido futbolísticamente como Catanha, es un exjugador brasileño nacionalizado como español que incluso llegó a ser internacional con nuestro combinado nacional. Llegaría a Salamanca en la línea de los trasvases habituales por aquel entonces en los que los protagonistas eran el club salmantino y jugadores brasileños y portugueses que sobre todo llegaban desde el país vecino. Aunque Catanha brillaría en España posteriormente, su paso por Salamanca fue discreto y terminaría por ser cedido al CD Leganés donde sí sumaría activamente. La explosión de La Gaviota, como también era conocido, se produciría en Málaga, donde anotaría más de 50 tantos en dos temporadas que le valdrían para firmar por el Celta de Vigo donde también sería importante sobre todo en sus primeras años con el conjunto gallego. Catanha era un delantero centro rematador que resultó ser letal en aquellas temporadas donde alcanzó sus mejores picos de forma.

Pacheta


José Rojo Martín, conocido en el mundo del fútbol como Pacheta, es un exjugador burgalés que destacó en Segunda División con el Atlético Marbella y el CP Mérida, lo que le valió para firmar por el Espanyol, equipo con el que disputaría cinco temporadas alcanzando sus mejores picos de forma. Posteriormente ficharía por el CD Numancia donde jugaría otras cuatro campañas antes de colgar las botas. Hoy en día es más conocido por su faceta como entrenador, pero en su etapa como jugador destacó por su buen trabajo en la medular siendo un futbolista muy polivalente que, además, llegaba con frecuencia a posiciones de ataque para anotar varios tantos por temporada.

Miguel Layún


Miguel Layún, uno de los referentes en los últimos años de la selección mexicana, jugó en Sevilla y seguidamente en el Villarreal. Curiosamente, Layún solo jugaría media temporada en cada club y, además, de forma seguida. Llegaría cedido al Sevilla en el mercado de invierno de la temporada 17-18, pero a pesar de jugar con regularidad no conseguiría permanecer en el club hispalense. El mexicano pertenecía al Watford inglés, pero pasaría gran parte de su contrato cedido en el Oporto y en el propio Sevilla, sin embargo, sería el Villareal quien lo contraría por tres años solo llegando a disputar ocho partidos de Liga antes de marcharse a Monterrey. Se trata de un polivalente mediocampista, un comodín que incluso puede ocupar posiciones defensivas en ciertos momentos del juego. Destaca por su capacidad para el pase, por lo que puede ser utilizado como lanzador a balón parado.

Janko Jankovic


Janko Jankovic es un exfutbolista croata que tuvo un paso prolongado por España, concretamente desde el año 1988 hasta el 1997. Durante todo ese tiempo jugaría para el Real Valladolid, el Real Oviedo y por último el Hércules CF. Se trataba de un jugador de equipo, un delantero cumplidor que fijaba defensas gracias a su poderío físico aportando un número aceptable de goles como titular o incluso como jugador de refresco.

Dely Valdés


Julio César Dely Valdés es un exfutbolista panameño que jugó en España durante seis años, tres en el Real Oviedo y otros tres en el Málaga CF. En ambos clubes hizo lo que mejor sabía: anotar goles con frecuencia para sus equipos. Y lo mismo hizo en el Cagliari, en el PSG y sobre todo con el Bolso (Nacional de Uruguay). Su mejor virtud era el remate de cabeza, aunque por lo general se distinguía por ser un delantero potente y muy completo que se convertía en una pesadilla para las defensas rivales.

Diego Cagna


Había sonado el nombre de Diego Cagna para el fútbol español, por lo que finalmente llegaría a firmar por el Villarreal en el año 1999. Dicho fichaje fue sorprendente, pues aunque llegó para jugar en Primera División, el club castellonense era un equipo que buscaba consolidarse en la categoría de oro del fútbol español teniendo más complicado optar a la incorporación de jugadores tan contrastados como el argentino. Cagna ayudó a hacer más grande el nombre de Boca en los años 90 desde su posición principal de volante izquierdo y también colaboró activamente en la consolidación del conjunto amarillo en la elite de nuestro fútbol.

Quique De Lucas


Quique de Lucas es un exfutbolista catalán formado en la cantera del RCD Espanyol de Barcelona. Jugaría para el PSG y para el Chelsea en edad temprana, pero tras su vuelta definitiva a España se desempeñaría en el Alavés, en Real Murcia o en el Celta de Vigo entre otros alternando la categoría de plata con la Primera División en sus últimos años de carrera. Se trataba de un mediocampista ofensivo con buen manejo del balón, vertical e incisivo por todo el flanco de ataque. Este cromo es un rara avis, pues se trata de un ejemplar nunca publicado y que data de la temporada 02/03, la que De Lucas jugó en el Chelsea sin llegar a formar parte de la plantilla del Espanyol durante ese curso.

Carlos Martins


Bullicioso exfutbolista portugués que jugó en España para el Recreativo de Huelva y para el Granada CF. En ambos casos jugaría una temporada para cada club, siendo la del Granada una cesión por parte del Benfica. En ambas etapas jugó frecuentemente siendo un titular habitual actuando como medio ofensivo aportando goles y asistencias. Se trataba de un jugador muy completo, creativo, veloz, vertical y con capacidad de desborde. Disfrutó de 17 presencias con la selección portuguesa a lo largo de su carrera.

José María Botella


José María Botella Ferris es uno de esos futbolistas que vivieron el salto desde el fútbol modesto a la elite con la camiseta del Rayo Vallecano. Se dice que aquella temporada 88/89 el conjunto madrileño tiró la casa por la ventana incorporando a Hugo Maradona, hermano de Diego, y a Laurie Cunningham, pero en aquella plantilla destacaría sobremanera José María Botella ayudando activamente a conseguir el ascenso para el conjunto vallecano. La siguiente campaña Botella jugaría en Primera División, pero con una participación menor en los onces motivada en parte por un encontronazo con Felines, técnico por aquel entonces del Rayo Vallecano. Botella fue entonces apartado del equipo y ya jamás volvería a jugar en Primera iniciando un camino que transcurriría mayormente por la Segunda B del fútbol español.

Demetrio Albertini


La eterna promesa del fútbol italiano jugó prácticamente toda su carrera en Italia, pero tendría dos únicas experiencias fuera de su país, la primera con el Atlético de Madrid y la última con el FC Barcelona suponiendo esta su etapa final como jugador en activo. Albertini llegó al Atlético de Madrid la temporada en la que el club rojiblanco retornaría a la Primera División tras dos años en el infierno para ayudar en la consolidación del equipo en la élite jugando de forma frecuente, aunque sin grandes alharacas. Precisamente fue Carlo Ancelotti quien no contó con él en su amado AC Milan, motivo por el cual se consumó su cesión al conjunto colchonero. Su paso por el Camp Nou fue casi testimonial, ya que llegó en el mercado de invierno y solo jugó algunos encuentros. Albertini era un mediocampista de creación, con mucha clase y una privilegiada visión de juego.