El último día en la oficina llega este fin de semana para Óscar de Marcos y es hora de despedirse de uno de los jugadores legendarios en la historia del club vizcaíno. Formado en la cantera del Alavés, llegó a Lezama en el 2009 para construir un formidable recorrido que ahora está a punto de terminar. De Marcos ha demostrado ser un jugador de gran polivalencia que se ha desenvuelto con solvencia como lateral en ambos costados, como mediocentro e incluso como atacante en los albores de su carrera. El de Laguardia ha conseguido encarnar a la perfección los valores y el espíritu del Athletic, club al que ha entregado todo su esfuerzo y dedicación con el aderezo de la experiencia en los últimos años de su trayectoria.
Óscar de Marcos
El último día en la oficina llega este fin de semana para Óscar de Marcos y es hora de despedirse de uno de los jugadores legendarios en la historia del club vizcaíno. Formado en la cantera del Alavés, llegó a Lezama en el 2009 para construir un formidable recorrido que ahora está a punto de terminar. De Marcos ha demostrado ser un jugador de gran polivalencia que se ha desenvuelto con solvencia como lateral en ambos costados, como mediocentro e incluso como atacante en los albores de su carrera. El de Laguardia ha conseguido encarnar a la perfección los valores y el espíritu del Athletic, club al que ha entregado todo su esfuerzo y dedicación con el aderezo de la experiencia en los últimos años de su trayectoria.